jueves, 3 de agosto de 2017

Una «excentricidad» en Mataró



[NOTA PREVIA: ARTÍCULO DE JORDI RIBALAYGUE PUBLICADO EN “EL MUNDO (ed. CATALUNYA)” EL 02.08.2017. Foto publicada en “Som Atents” el 17.01.2017.] Trocear una fábrica catalogada como patrimonio histórico a pedazos de unos tres metros cada uno y llevárselos a un descampado donde llevan casi ocho años a la espera de ser encajados como un puzle a 100 metros de donde estaban sus cimientos fue, además de una infracción de la normativa vigente, una «excentricidad inverosímil». 
Lo declara una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya a la vista del desmontaje y posterior traslado de Can Fàbregas, una harinera de Mataró datada del siglo XIX que estaba salvaguardada con el mayor rango de protección, situada en un solar que El Corte Inglés adquirió para edificar un centro comercial tras ganar un concurso del Ayuntamiento.
Los grandes almacenes nunca se han empezado a construir. El motivo son los pleitos entablados desde hace una década por el desmantelamiento de la factoría, que a tenor del último fallo debería erigirse de nuevo donde el Consistorio la arrancó, en una decisión que contravino el máximo nivel de catalogación que la propia corporación había otorgado al inmueble en 1999.
De no darse un vuelco en el Tribunal Supremo con el recurso anunciado por el Ayuntamiento (gobernado por una coalición de PSC y PDeCAT), el proyecto de El Corte Inglés que se gesta desde hace dos décadas en Mataró está «muerto», según fuentes consultadas. 
El alcalde, el socialista David Bote, ha reconocido que la apertura del establecimiento por el que el Consistorio y entidades de comerciantes siguen abogando es «ahora muy difícil» y que «las cosas no se han hecho bien» para que el operador se instale. La empresa ha aducido inseguridad jurídica debido a los litigios en torno al solar que el Ayuntamiento le concedió para no haber empezado las obras, pese a haberse gastado ya cerca de 30 millones en Mataró, que figuraba como uno de sus planes de expansión prioritarios.
Los hechos que han llevado a El Corte Inglés a no levantar de momento el complejo que esperaba abrir en 2014 se han coronado ahora con una sentencia severa contra el Ayuntamiento y la Generalitat, que había bendecido los pasos dados por el municipio. El tribunal trata de «irracionalidad» y de arreglo «cercano a lo delirante» que el «conjunto protegido y catalogado» fuese «seccionado y empaquetado».
La sentencia atiende un recurso de la Assemblea Pagesa contra las maniobras con las que la administración ha intentado sortear una resolución del TSJC de 2012, fruto de otra denuncia de la Plataforma Salvem Can Fàbregas, y que ya dictó en contra de que se hubieran desplazado los restos del recinto fabril. La plataforma decidirá en breve si reclama al tribunal que el Consistorio devuelva las piezas a su lugar de origen.
La mudanza de los fragmentos costó 1,8 millones de euros al Ayuntamiento. Otras sentencias anularon el intento del Consistorio de cargar buena parte del gasto a otros propietarios de la zona. Además, el último fallo sostiene que el almacenamiento en suelo agrícola es ilegal y que no queda probado que la fábrica histórica y los grandes almacenes no pudieran convivir en la misma manzana ni que el establecimiento no pudiera ubicarse en otro terreno.
El Corte Inglés señala que sus abogados estudian la resolución y espera para pronunciarse sobre el futuro del proyecto. La compañía recalca que no tuvo nada que ver con el desmontaje de Can Fàbregas. En caso de que la empresa denunciara por incumplimiento de contrato al Ayuntamiento, Mataró se enfrentaría a una indemnización millonaria por no alzarse el centro, que preveía crear unos 800 empleos directos.
Las últimas resoluciones, que revierten los cambios del planeamiento aprobados para hacer posible el establecimiento, contrastan con otros fallos que vieron lícito que Can Fàbregas fuera desgajada por el gobierno del exalcalde Joan Antoni Baron (PSC). El exedil llegó a ser imputado por ello, y fue exonerado sin llegar a juicio. Baron ha preferido no responder a este medio.

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